-¿Qué vamos a hacer cuando lleguemos? - preguntó Adam con la vista en la ventanilla del avión.
- No lo sé, hijo - contestó mi padre admirando la portada de una revista.
- ¿Cuánto dura el vuelo? - pregunté.
- 9 horas - contestó Adam.
Suspiré. Lo bueno es que me preparé para este largo viaje; MP3, computadora, iPod, revistas, muchas cosas que me mantendrán ocupada. Olvidé mencionar que el avión tiene Wi-Fi incluido, mejor para mí.
- ¡¿Qué?! - exclamamos Adam y yo al unisono.
- Hijos... Allá está su familia, se divertirán más ahí. Están sus primos, tíos, su nueva casa...
- Si, y olvidaste mencionar nueva escuela - lo interrumpí. Me levanté del sillón de la sala, enojada, y me dirigí a la cocina por un vaso de agua.
- ______ - dijo mi padre en forma de súplica.
- Y allá también tendrás todo eso.
Me senté en un banco de la barra desayunadora viendo mis pies y tomé un gran trago de agua. Mi papá jaló una silla hasta mí, se sentó y pasó su brazo por encima de mis hombros.
- Es lo mejor para todos, hija - suspiró -. Solo sigue a tu corazón, ¿si? - me besó la frente y se fue.
- Espero que en verdad sea lo correcto - pensé en voz alta.
- Estimados pasajeros, favor de abrochar sus cinturones y apagar cualquier tipo de aparato electrónico durante el ascenso. Gracias - cortó.
- Buenas noches, me despiertan cuando lleguemos - dijo Adam, reímos y él se recargó en la ventana del avión cerrando sus ojos lentamente.
Sentí la presión de a gravedad cuando el avión prendió vuelo hacia su destino, Londres.
Me puse mis audífonos y puse la canción "The Way" de Ariana Grande y Mac Miller. Me acomodé en el asiento y sentí mis ojos cerrarse poco a poco hasta caer en un profundo sueño.
- Psst psst - me movía lentamente y comencé a despertar - ______, despierta.
- ¿Eh? - abrí los ojos y visualicé a mi padre frente a mi.
- Hola, mi niña. Bienvenida a Londres - sonrió y con su cabeza me hizo una señal de que mirara por la ventana.
Acto seguido, me asomé por la ventana ignorando los ronquidos de Adam. Londres es hermoso, el cielo, el clima, las personas, el acento... Amo, adoro el acento británico.
- Estimados pasajeros, hemos llegado al destino Londres, Inglaterra, gracias por su preferencia de aerolínea y esperamos que halla sido de su agrado. Eh, tenemos la obligación de informarle que fueron 8 horas de viaje, llegamos más rápido de lo previsto y le pedimos una disculpa - cortó.
El avión descendió y cuando tocó tierra, todo el avión se sacudió.
- ¿Una hora menos? - miré a mi papá - ¿eso es bueno?
- Pues... Tus tíos nos recogerían a las 5:00 p.m del aeropuerto, y son las 4:00 p.m. Debes ajustar tu reloj.
- De acuerdo.
Una vez ya configurado mi reloj, me dispuse a despertar a Adam.
- Adam... Adam - susurraba mientras picaba consecutivamente su mejilla.
- Asdfghjklñ - se retorció y cerró su boca al despertar - ¿ya llegamos?
- Ya - reí.
- ¿Qué hora es? - bostezó.
- Las 4 p.m
- ¿De aquí o de (tupaís)?
- De aquí.
- Vamos, niños - se levantó sacando nuestras cosas del "maletero" del avión.
Al bajar del avión y recoger las demás maletas, nos sentamos en las bancas de fuera del aeropuerto a esperar a mis tíos. 30 minutos después, llegaron mis tíos junto con una prima y... ¿Mi abuela? ¿Qué hace ella aquí? Se supone que no sabía nada para poder sorprenderla en su casa esta tarde.
- ¡Mis niños! - exclamó mi abuela trotando hacia nosotros y darnos un gran abrazo.
- ¡______! - escuché esa voz gritar mi nombre. Ahí estaba, la niña a la que recordaba que tenía 7 años.
- ¡Katherine! - corrí hacia ella y nos abrazamos - ¿Cómo estás? Has crecido mucho, estás hermosa.
- ¿Tu qué? No te quedas atrás primita - reímos - ¡tan solo mírate! Tienes un cuerpazo y estás bella.
- Lo que hace el tiempo - reímos - iré a saludar a Adam y a tío (nombredetupapá) - se fue.
- ¡______! - gritó mi tía alejándose de Adam hasta darme un gran abrazo.
- Hola tía - sonreí y la abracé.
- ¿Cómo estás, mi niña?
- Excelente, tía, ¿tu? - nos soltamos.
- Muy bien - sonrió - eh... Tu prima Claire se quedó dormida y ya sabes que no me gusta despertarla, por eso no vino.
- Está bien, tía, no te preocupes - sonreí - ¿Y Hanna?
- Hanna está en una cita con su nuevo novio - dijo Kate (Katherine) detrás de mí.
- ¡Wow! - exclamé - ¿es buena onda?
- La verdad es que es muy hipócrita, egoísta, amargado, malhumorado, torpe, patético...
- Si, ya entendí - la interrumpí y reímos.
Se me olvidó comentar, Hanna y Katherine son hermanas y Hanna es la mayor. Subimos al auto y nos fuimos a casa de mi tía. Llegamos y Kate me llevó a su habitación.
- ¿Ya sabes a qué colegio estás? - nos sentamos en la cama.
- Creo que sí... - pensé - Al Royals...
- ¿"Rogers Hall"? (en realidad es una escuela de Mérida, Yucatán, México, pero solo ese me sé) - asentí con la cabeza - ¡YEI! ¡En ese estoy yo!
- ¿De verdad? - sonreí.
- ¡Sí! Los chicos - empezó a hacer gestos graciosos - están buenísimos - reí.
Katherine llamó a una amiga suya que supongo está en mi supuesto salón. Ella llegaría a las 7:00 p.m y son las 6. Platicamos sobre nosotras hasta que llamaron a la puerta.
- Fatty parece un poco loca y buena onda, pero tranquila, en realidad si lo es - reí y Kate abrió la puerta.
Visualicé a una chica de estatura media, castaña, ojos marrones claros, labios carnosos y con hoyuelos, sonrisa divina y dientes perfectos. Es muy bonita.
- ¡Hola! - dijo la chica con una gran sonrisa en su cara.
- Hola - dije.
- ¿Eres la prima de Katherine? Soy Fátima, pero mis amigos me dicen Fatty.
- Hola, Fatty, me llamo ______, pero dime ______.
- Hola, ¿cómo estás Katherine? Muy bien ¿y tu? Bastante bien, muchas gracias por preguntar - se dijo a sí misma restregando en nuestra cara que no le habíamos hecho caso.
Reímos.
- Perdón - dijimos Fatty y yo al unisono.
- Vamos, entra - dijo Kate riendo y cerró la puerta.
Subimos a la habitación de Katherine y las tres nos sentamos en el piso formando un pequeño triángulo con forme estábamos sentadas.
- Bien - habló Kate - Fatty, cuéntale a mi primita hermosa sobre tu salón.
- De acuerdo - sonrió - Amm... Los chicos más guapos están en nuestro salón - reímos - hablo en serio.
- ¿De verdad? ¿Cómo se llama el que se te hace más guapo? - le pregunté.
- Juan, pero es el novio de mi mejor amiga y respeto su relación... Y a Juan - reímos -. En nuestro salón están los alumnos más desordenados y gritones de toda la generación. Estás en mi salón, "A". Kate está en el "B".
- De acuerdo... - sonreí.
- ¡______! -escuché una voz masculina gritar mi nombre desde el primer piso.
- ¡¿Mande?! - grité. Era Adam.
- ¡¿Dónde estás?!
- ¡En la habitación de Kate!
Escuché que Adam subía las escaleras y entró a la habitación tras tocar varias veces la puerta.
- Hola - miró a Fatty - soy Adam.
- Hola, Adam, soy Fátima pero dime Fatty.
- De acuerdo Fatty - le sonrió y me miró - dice papá que ya nos vamos - se fue.
- ¿Quién era él? - dijo Fatty, sorprendida.
- El hermano de ______ - contestó Kate.
- Si... - dije y sonreí - Bueno, mañana nos vemos entonces - le dije a Fatty y me levanté.
- Así es, que Kate te lleve a la biblioteca para que te valla enseñando el colegio y te vallas conmigo a todas las clases - sonrió.
- De acuerdo, gracias - dije.
Me despedí de un beso en la mejilla y salí de su casa.
En el transcurso del camino fue silencio, conecte mi celular en el auxiliar y puse "Better Together" de Fifth Harmony. Llegando a mi casa nos bajamos y al momento en el que mi padre abrió la puerta, Adam y yo nos quedamos boquiabiertos.
- ¿Es nuestra casa? - preguntó Adam asombrado.
- Toda nuestra - contestó orgulloso mi papá.
- Es increíble - exclamé.
Primero barrimos y trapeamos todo lo que es el primer piso. Luego, acomodamos todo lo necesario en la cocina y después, nos servimos un poco de cereal con leche para cenar.
- Quiero que hoy se duerman temprano - me miró y entre una cucharada de leche a mi boca - mañana empiezas la escuela.
Al decir eso, me atraganté con la leche y comencé a toser como loca.
- ¿¡QUÉ!? - exclamé recuperando un poco de oxígeno faltante - ¿Tan rápido? - me limpié con una servilleta.
- Claro, quiero que se vallan acostumbrando al ambiente, la gente y todo por el estilo.
- Pero papá... - me interrumpió.
- Pero nada - sonrió triunfante.
Adam ya se había graduado de la escuela, pero tenía que encontrar trabajo, y eso es peor que la escuela. Ingénuo.
Terminé de cenar, Adam lavo los platos (trastes), recogí y limpie la mesa y subí a mi supuesta habitación con mi nombre tallado en madera colgado en la puerta.
Mi habitación está bastante grande, por el momento solo esta mi cama y cuando llegue la mudanza podré acomodarlo y pintarlo como yo quiera. ¿Olvide mencionar que había un baño dentro? Creo qué sí.
Me di una ducha rápida, ya que no había agua caliente y obviamente no faltaron mis pequeños ataques cardiácos durante mi aseo corporal.
Me puse mi pijama, me cepille los dientes y me dormí.
~Al día siguiente.
- ¡DESPIERTA! - gritó en mi oído.
- ¡AHH! - desperté dando un brinco.
Acostumbre mis ojos a la luz que había en la habitación y visualice a Adam arrastrandose y golpeando la pared por la risa.
- Idiota, ¿Qué rayos te pasa? - dije molesta.
- Dice... Papá... Dice pap... - ni siquiera podía terminar su frase de tanta risa.
- ¿Qué? - me senté y con el rabillo del ojo vi que el reloj marcaba las '6:47' de la mañana - ¡¿QUÉ?!
Me levanté corriendo y tiré toda mi ropa de la maleta para encontrar algo que ponerme. Entro a las '7:10' y ni siquiera me he vestido.
- Dice papá que te levantes, llegarás tarde - dijo Adam ya tranquilo, rió y se fue.
No tendría tiempo de bañarme, así que me vestí con unos shorts de mezclilla, una blusa olgada color blanco y unos vans blancos. Me maquille de color muy naturales, cepille mis dientes y baje corriendo por las escaleras.
- ¡TOMO MI CELULAR, MI BOLSO Y YA ESTOY LISTA! - grité, no sabía donde estaba mi papá.
- Sólo te digo que son las 7 de la mañana - Dijo mi padre trás de mi.
- Okay...
Termine de acomodar mis libros, guarde mi celular, mi cartera, etc. Y mi papá y yo nos fuimos en su nueva camioneta a mi escuela.
- ¿Estas nerviosa? - me preguntó.
- Un poco, sí.
- ¿Por qué?
- Por que no tengo ni 24 horas en esta ciudad y ya asisto a la escuela - rió.
- Bueno... No tienes por qué estarlo, eres la chica nueva, causas misterio. Eres extranjera, causas misterio y todo mundo quiere conocerte - apretó mi mejilla y sonreí.- Recuerda, las instalaciones son un laberinto, si no las conoces te perderás fácilmente. Ve a dirección general y pide hablar con la directora Blanca.
Miré mi reloj de mano: '7:15', genial, mi primer día y llego tarde. Noten el sarcasmo.
Pasaron 5 minutos más y logramos llegar. Me baje del auto, acomode mi cabello y mi blusa y me adentre a un prolongado pasillo. ¿A dónde rayos me voy? ¿Dónde estoy? Vi a un maestro sentado en una banca fuera de un salón y me acerqué a él.
- Buenos días - saludé.
- Buenos días, señorita - me miró con atención - ¿No deberías estar en clase?
- Claro - hice una risa nasal - es que soy de nuevo ingreso y no se cómo llegar a la dirección general.
- Ohh... Que maleducado soy - dijo sorprendido - mira, a dónde tu quieres llegar tendrás que pasar por...
¿Qué? Vuelta a la derecha, izquierda, arriba, puerta de.., sales a.., llegas cerca de... Muchas direcciones, no me acordare de eso en 2 minutos. Deberían de tener uno de esos mapas de los centros comerciales que dicen "Usted está aquí" y una flecha apuntando en el sitio en el que estás.
- ...Pero un camino más fácil de irte al fondo de este pasillo, vuelta a la derecha y al final - sonrió.
¿No era más fácil decirme eso desde un principio? Llevo 25 minutos de retraso.
- Gracias - hice una sonrisa fingida y me fui.
Al llegar, entré a las oficinas y me dirigí a una de las 3 secretarías que estaban a la vista.
- Buenos días, señorita - me sonrió muy amablemente, la secretaria. Dejo de escribir en la computadora y me prestó atención.
- Buenos días - sonreí - Amm... Soy ______ ______, y soy de nuevo ingreso ¿Puedo hablar con la directora?
- Lamento informarle que la directora Mary no ha llegado.
- Ohh... ¿A qué hora llega normalmente?
- Debería llevar en 10 minutos, si gustas sentarte y esperarla, no debe tardar.
- Gracias... - miré en su credencial que colgaba del cuello - ... Olivia - sonreímos y me senté en un sillón negro.
Esperé 10 minutos y entro una señora alta, delgada, usa lentes y tenía una sonrisa muy grande. Le calculo unos 45 años.
- ¿______ ______? - me miró y asentí.
- Hola ______, me llamo Jessie y soy la psicóloga de la escuela. Te llévate a tu nuevo salón. - sonrió.
Me paré y la seguí a 3 salones, pero al parecer ninguno era el mío.
- Creo que están en clase de Francés... - Jessie se asomó por la puerta de cristal y sonrió - Si, linda, este es tu nuevo salón.
De acuerdo, estoy nerviosa, siento un zoológico en mi estómago y tiemblo. Ya ha llegado mi hora, espero que me valla muy bien.
DESÉENME SUERTE.
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Hola chicas!! En verdad lamento no haber subido en 1 mes... Como ya les había dicho, me cambie de ciudad y es la cosa más difícil, cansada y aburrida que pueda existir.
Ya tengo el 2 capitulo hecho y cuando pueda lo subiré. Por favor comenteeeeen!
Una pregunta: ¿de qué PAIS y ESTADO son? Yo soy de México, Yucatán. Espero que alguna viva donde yo!
LAS ADOROOOO!!
Chao :D
- Paulina.
